Hacía mucho tiempo que no sabía de ella, hasta aquel día. Ansioso por saber como le va todo, ya que no la veía desde la universidad.
Una tarde lluviosa, esperando su llamada como tantas otras tardes. Sonó el teléfono. Era ella, me invitaba a tomar algo en el bar de la esquina. La esperé sentado en una de las mesas del porche, con mi paraguas, ya que llovía bastante. La pregunté si la pasaba algo, no tenía muy buena cara.
Y entre sorbo y sorbo me explicó. Después de que la despidieran de su anterior empleo, no había trabajo y tubo que meterse a repostería. No la recibieron bien sus compañeros, la hacían el trabajo mas duro de lo que era. No sabía que hacer, y dimitió. Su jefe, al ver que nadie realizaba bien el cargo, la volvió a llamar. Ella dándoles otra oportunidad volvió a su cargo.
Una tarde lluviosa, esperando su llamada como tantas otras tardes. Sonó el teléfono. Era ella, me invitaba a tomar algo en el bar de la esquina. La esperé sentado en una de las mesas del porche, con mi paraguas, ya que llovía bastante. La pregunté si la pasaba algo, no tenía muy buena cara.
Y entre sorbo y sorbo me explicó. Después de que la despidieran de su anterior empleo, no había trabajo y tubo que meterse a repostería. No la recibieron bien sus compañeros, la hacían el trabajo mas duro de lo que era. No sabía que hacer, y dimitió. Su jefe, al ver que nadie realizaba bien el cargo, la volvió a llamar. Ella dándoles otra oportunidad volvió a su cargo.
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