Estaba caminando por la calle del Sol buscando algo que me inspirase para escribir mi libro y de repente las hojas dejaron de bailar, el cielo oscuro otoñal se abrió y apareció un cielo azul y una luz que brillaba intensa. Era ella, la chica de mis sueños, mi musa, mi inspiración. Me quedé embobado como si fuese un chico enamorado de amor. La chica paso por mi lado y note como me faltaba el aire. Cuando me recuperé, ella ya no estaba. La fui a buscar y no la encontré. Estuve pensando en ella las siguientes semanas y cuando ya creí haberla olvidado apareció. Yo estaba sentado en un bar tomándome un café y escribiendo cosas sin sentido. La miré y seguía viendo la misma chica perfecta. Ella me devolvió una sonrisa, se acercó a mí y desde ese día empecé a escribir sobre mi futuro, sobre ella.
domingo, 16 de noviembre de 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario